El software de
video regularmente es muy intuitivo y posee cuatro aspectos principales:
1-
Una ventana
donde previsualizar el video.
2-
Una línea
de tiempo. Aquí se insertan los componentes de nuestro film (imágenes, sonidos,
otros videos). Las imágenes se agrupan horizontalmente
en una misma línea, permitiendo aplicar algunos efectos como el clásico “entrecruzamiento
de imágenes”. Las imágenes también se pueden alinear verticalmente en capas,
donde una imagen en un nivel superior cubre a las que la siguen, permitiendo
crear fondos o recuadros. El audio tiene
regularmente su propia pista lo que nos permite sincronizarlo con la imagen.
3-
Un panel
de herramientas. Desde los clásicos
cortar y pegar, insertar texto hasta complejos editores.
4-
Un panel
de efectos. Dependiendo del software, regularmente es posible encontrar efectos
que nos permitan mejorar o alterar nuestro producto: cambiar el color o el
tono, agregar efectos de película, etc.
Los software más usados: Vegas Pro
(Sony), Pinnacle Studio (Avid), iMovie (Apple), Windows Movie Maker (Microsoft),
Adobe Premiere (Adobe), Kino (GNULinux).
Personalmente
trabajo en plataforma Windows con Sony Vegas Pro en su versión 10, es muy fácil
de usar y cuando no sé como hacer algo existen miles de tutoriales en you tube
que pueden aportar a tu aprendizaje.
Otro aporte del
software es las opciones que puede brindarte para generar el producto final, por
lo que es bueno hacer pruebas y ver si posee una amplia gama en formatos, tamaños
y definiciones. Aquí es bueno verificar al generar el video final el consumo de
recursos del equipo al renderizar (habrá un post futuro respecto a este tópico).
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